Como ya sabemos, después de 41 años y varias generaciones de nervios, esperanzas y miedos, la selectividad tal y como la conocemos ha llegado a su fin. Esta prueba será sustituida por una prueba final que se realizará al finalizar el Bachillerato. La principal diferencia respecto a la PAU es que su superación será un requisito indispensable para poder obtener el título de Bachillerato.
Tras la negativa del gobierno a los rectores de las universidades de prorrogar un año más la PAU con el fin de tener más tiempo para preparar al alumnado, todavía no tenemos mucha información sobre los detalles de la prueba. No obstante, a cuentagotas, a través de la prensa, vamos obteniendo pinceladas sobre qué nos deparará la temida "Reválida". Todo apunta a que para el presente curso 2016-2017 no sufrirá muchos cambios. La estructura seguirá siendo la misma y la manera de puntuar también y, lo más importante, no será requisito para obtener el título. Sin embargo, no queda muy claro el tema de las ponderaciones o si los estudiantes que no hayan cursado Filosofía en 2º deberán examinarse de la asignatura de 1º.
Mientras continúan las reuniones y negociaciones, los alumnos siguen preocupados por su futuro inmediato y haciéndonos preguntas que, muchas veces, no sabemos responder. Por eso, hoy dejamos un pequeño adelanto resumiendo lo que ya sabemos a expensas de actualizar los cambios que se vayan produciendo.
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